El rebeco está perfectamente adaptado a su forma de vida entre las escarpadas montañas. Ha evolucionado a tener unas pezuñas flexibles que le permiten caminar firmemente en este hábitat.
En temporadas cálidas, la piel del rebeco es marrón claro, mientras que en invierno se vuelve muy oscura y gruesa. Las marcas negra y blanca de su cabeza son muy características de esta especie. Mientras que ambos sexos tienen cuernos curvados hacia atrás, los cuernos de los machos son más gruesos y más curvados que los de las hembras.
Distribución
Se distribuyen en las zonas pirenaicas pertenecientes a los pirineos catalanes y aragoneses, en las provincias de Lleida y Huesca se pueden encontrar rebecos pirenaicos. Por otro lado, el rebeco del cantábrico se encuentra en la cordillera cantábrica frente al mar cantábrico en las provincias de Cantabria y Asturias. La zona de caza se encuentra a 4 horas de los aeropuertos de Barcelona y Madrid.
Cacería
Se puede practicar el rececho de rebeco desde mayo a diciembre, ambos inclusive. Las zonas de caza en las que organizamos las cacerías están bien gestionadas por lo que hoy en día hay buenas poblaciones y podemos conseguir buenos trofeos de rebeco y sarrio.